Digamos que este miércoles comenzó a la 1:30 de la mañana con Sofía llamando por mi desde su cuarto. Se despertó por el escándalo de los perros del vecino que día si, día no, comienzan a ladrar quien sabe porque.
Estamos tratando de que Sofy nuevamente duerma en su cuarto y no se pase a dormir a nuestra cama. Desde que nació el hermano ese ha sido uno de sus retrocesos. Dice que porque ella tiene que dormir solita en su cuarto, cuando Raul duerme con nosotros en su cuna. Ya organice el cuarto de ella para traer a Raul, mas estaba esperando unos días mas calientes para mudarlo definitivamente. Vamos a ver si esta semana lo hago. Volviendo al tema... me levante por allí unas 6 veces a ver que quería, ya tipo 3 de la mañana le propuse ir a orinar (acordándome de mi niñez), fuimos y santo remedio. Mal termino ella y comenzó el. Raul tiene algo de tos, y cuando tose, pierde la chupeta y se despierta. Toca a la mama levantarse y ponérsela. Esto paso, digamos, unas 5 veces hasta que ya tipo 6 de la mañana me rendí y le di de mamar viendo las noticias.
Aunque es algo que me irrita (dormir mal o estar semidespierta mucho tiempo) mejor no me quejo porque es simplemente cosas de ser mama de dos. Nada que ver a tener noches terribles por estar ellos enfermos. Dios los proteja... solo es que me queda un cansancio allí latente y unas ojeras que no se van ni por milagro. Extraño esos días que simplemente me acostaba y hacia una buena siesta. Ya no me acuerdo de haber pasado una sola noche durmiendo derechito sin despertarme. Mi mamá siempre lo decía, que aprovecharamos dormir ahora, que despues de tener hijos nunca mas se duerme igual. Tienes toooda la razón. Van siendo las 10 de la mañana, ya Sofia esta en su escuela, Raul duerme y a mi me espera arreglar un poquito la casa y ponerme a trabajar en el pc.
Dios nos bendiga en este día que comienza. Amen.
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